Google declaró la semana pasada que planea ampliar a Alemania su campaña para “vacunar” a la gente contra la información errónea -como si fuera un virus- tras ver “resultados prometedores” en Europa del Este.

La campaña se basa en un enfoque denominado “prebunking“, diseñado para enseñar a la gente a detectar las afirmaciones falsas antes de encontrarse con ellas, “inoculándoles” así contra la “enfermedad” de la información errónea “como hace una vacuna” contra una enfermedad física, informó Euronews.

El gigante tecnológico publicará una serie de vídeos cortos en los que se destacan técnicas -como el alarmismo, la búsqueda de chivos expiatorios, las comparaciones falsas, la exageración y la falta de contexto- que se utilizan habitualmente para promover afirmaciones engañosas.

Los vídeos diseccionan estas diferentes técnicas para que los espectadores puedan reconocerlas más fácilmente al consumir medios de comunicación.

Los defensores de la campaña dicen que es una “forma eficaz de abordar la información errónea a gran escala”.

Pero algunos críticos alegan que la campaña de Google se dirige selectivamente a información relacionada con intereses corporativos y gubernamentales y está motivada por el dinero más que por un deseo sincero de proteger a los lectores de información falsa.

“Ellos [los líderes de Google] quieren que Google sea lo que consideran un lugar seguro para los anunciantes”, afirma Clayton Morris, antiguo presentador de “Fox News” que copresenta el programa de noticias en línea “Redacted“.

Vídeos para publicar como anuncios en Facebook, YouTube y TikTok

Los vídeos “prebunking” de Google se publicarán como anuncios en Facebook, YouTube o TikTok en Alemania. También se está preparando una campaña similar en la India, según informa AP.

El otoño pasado, Google realizó una campaña de vídeo de prueba en Polonia, la República Checa y Eslovaquia.

La campaña se centraba en vacunar a los espectadores contra las “falsas afirmaciones sobre los refugiados ucranianos” y mostraba técnicas utilizadas habitualmente para apoyar tales afirmaciones, como historias alarmistas o infundadas sobre refugiados que cometen delitos o quitan el trabajo a los residentes.

AP no informó de las declaraciones concretas sobre los refugiados ucranianos que Google consideró falsas.

Los vídeos fueron vistos 38 millones de veces en Facebook, TikTok, YouTube y Twitter.

Según los investigadores, las personas que vieron los vídeos eran más capaces de identificar las técnicas de información errónea y menos propensas a difundir afirmaciones falsas que las que no habían visto el vídeo.

“Se puede pensar que la información errónea es como un virus”.

Alex Mahadevan, director de MediaWise, una iniciativa de alfabetización mediática del Instituto Poynter, dijo a AP que la estrategia era una “forma bastante eficaz de abordar la información errónea a escala, porque se puede llegar a mucha gente y al mismo tiempo abordar una amplia gama de información errónea”.

En noviembre de 2022, Google y YouTube donaron al Instituto Poynter 13,5 millones de dólares para reforzar sus esfuerzos de verificación de datos, con 12 millones destinados a crear un Fondo Global de Comprobación de Hechos (“Global Fact Check Fund”).

“Se puede pensar que la información errónea es como un virus”, explica a la AP el doctor Sander van der Linden, catedrático de Psicología Social en la Universidad de Cambridge. “Se extiende. Persiste. Puede hacer que la gente actúe de determinadas maneras”.

A veces también necesita una “dosis de refuerzo” periódico, según la AP, porque los efectos de los vídeos acaban desapareciendo.

Van der Linden ayudó a Google a desarrollar su campaña de “prebunking” y actualmente asesora a Meta, propietaria de Facebook e Instagram, según AP.

Google anunció su campaña ampliada justo antes del inicio, el 17 de febrero, de la Conferencia de Seguridad de Múnich.

Según AP, el momento del anuncio refleja la creciente preocupación de los funcionarios y las empresas tecnológicas por el impacto de la desinformación.

“Hay un verdadero apetito de soluciones”, declaró a AP Beth Goldberg, responsable de investigación y desarrollo de Jigsaw, una unidad de Google que “explora las amenazas a las sociedades abiertas“. “Utilizar anuncios como vehículo para contrarrestar una técnica de información errónea es bastante novedoso. Y estamos entusiasmados con los resultados”.

Google no ha anunciado planes para ampliar su campaña a Estados Unidos, por lo que se desconoce si la empresa californiana aplicará sus tácticas de “prebunking” de información errónea en su territorio y cuándo lo hará.

Los críticos afirman que la campaña de “prebunking” promueve “intereses empresariales y gubernamentales”

Al comentar el último anuncio de Google, la copresentadora de “Redacted” Natali Morris dijo: “Está claro que la idea corporativa de la información errónea en realidad sólo está relacionada con los intereses corporativos y gubernamentales, en absoluto con el interés humano”.

Los temas abordados por la campaña de información errónea de Google, como el COVID-19 y el cambio climático, son temas “que darán más poder a los gobiernos o a las empresas”, dijo Natali.

Mientras tanto, otros temas de interés humano -como el tráfico de niños- permanecen sin ser tocados por Google, dijo.

Clayton Morris, copresentador de “Redacted” junto a su esposa Natali, cree que los esfuerzos de Google por combatir la información errónea están motivados por el dinero.

Por ejemplo, dijo Clayton, empresas como Pfizer y Moderna gastan miles de millones de dólares en publicidad y Google quiere ser un “entorno favorable a los anunciantes”, por lo que “rechaza” la información y las opiniones que critican los productos farmacéuticos de estas empresas.

Imagínese que los ejecutivos de Pfizer estuvieran sentados allí pensando en dónde invertir su dinero en publicidad y empezaran a ver resultados de búsqueda en Google que dijeran cosas como Pfizer esto, Pfizer lo otro… Por eso [Google] rebaja el ranking de todo esto para apartar ese material y seguir obteniendo sus buenos ingresos publicitarios”, afirmó.

Ahora las empresas farmacéuticas ya ni siquiera tienen que producir anuncios porque Google lo hace esencialmente por ellas, añadió Natali.

“Imagínese cómo sería un vídeo de “prebunking” para una vacuna COVID”, dijo.