Los empleados del segundo mayor distrito escolar de Estados Unidos presentaron la semana pasada una demanda para evitar que el distrito imponga las vacunas COVID-19 como condición para el empleo.

California Educators for Medical Freedom, con la ayuda del ‘Health Freedom Defense Fund’ (HFDF), el 17 de marzo presentó una demanda federal contra el Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles (‘Los Angeles Unified School District’, LAUSD por sus siglas en inglés).

En un comunicado de prensa, el HFDF dijo que el mandato de vacunación del LAUSD viola la ley federal y los derechos humanos básicos al exigir a los empleados que se pongan una vacuna experimental para seguir siendo empleados.

Todas las vacunas COVID disponibles en los Estados Unidos -Pfizer, Moderna y Johnson & Johnson- están aprobadas bajo la Autorización de Uso de Emergencia (‘Emergency Use Authorization’, EUA por sus siglas en inglés) de la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (‘U.S. Food and Drug Administration’, FDA por sus siglas en inglés). Según la propia definición de la FDA, eso hace que las vacunas sean “experimentales” hasta que la FDA las autorice o no.

Los empleados de la escuela alegaron en su demanda que el estatuto que otorga a la FDA la facultad de autorizar un producto médico para uso de emergencia, 21 U.S.C. § Sección 360bbb-3, exige que la persona a la que se le administre el producto no aprobado sea informada de los beneficios y riesgos, y de su derecho a rechazar el producto.

La FDA emitió una Hoja informativa para proveedores de atención sanitaria y una Hoja informativa para receptores y cuidadores de cada una de las tres vacunas aprobadas para uso de emergencia. Las hojas informativas indican, entre otras cosas, que el proveedor debe comunicar la información al receptor antes de administrar la vacuna, incluyendo que el receptor tiene la opción de aceptar o rechazar la vacuna.

En su demanda, los empleados alegan que el artículo 360bbb-3 reconoce la “doctrina bien establecida” de que los experimentos médicos, o la “investigación clínica”, no pueden realizarse en seres humanos sin el consentimiento expreso e informado de la persona que recibe el tratamiento.

Según el HFDF, el derecho fundamental a evitar la experimentación humana impuesta tiene sus raíces en el Código de Nuremberg de 1947, que posteriormente fue ratificado por la Declaración de Helsinki de 1964, codificada además en el Código de Reglamentos Federales de los Estados Unidos y adoptada por la Legislatura de California. Dice que “ninguna persona sujeta a la jurisdicción de este estado puede ser obligada a someterse a la administración de medicina experimental sin el consentimiento informado de esa persona”.

Desde la adopción del Código de Nuremberg, las naciones libres han reconocido que la experimentación médica forzada de cualquier tipo es inhumana y poco ética. “No hay ninguna “excepción de pandemia” en la ley ni en la Constitución”, afirmaron los demandantes en su demanda.

“Este es un caso muy importante para los educadores de todo Estados Unidos y es probable que siente un precedente para todos nosotros”, dijo Michael Kane, profesor de Nueva York y fundador de ‘NY Teachers for Choice’.

“A veces lo único que se necesita es que alguien se levante y diga ‘No’ para recordar a todo el mundo que estamos en todo nuestro derecho de resistirnos a las extralimitaciones del gobierno. Y eso es lo que es: una extralimitación del gobierno”.

Kane dijo que el sindicato de maestros de LAUSD “definitivamente juega un papel en todo esto” y que los maestros de LA necesitan presionar a su sindicato y amenazar con retirar su dinero de apoyo al sindicato si no apoya su derecho a elegir. “Los miembros de los sindicatos de base deben exigir a sus dirigentes sindicales que rindan cuentas y les obliguen a representar a quienes están a favor del derecho a elegir en todos los procedimientos médicos”, dijo Kane.

En la denuncia se afirma que los empleados del LAUSD empezaron a recibir el mes pasado comunicaciones del superintendente Austin Beutner y de otros representantes del LAUSD en las que se les indicaba que pidieran cita para vacunarse.

Ninguna de las comunicaciones a los empleados incluía la información de la hoja informativa que la FDA exige que se entregue a los receptores de la vacuna en el marco de la EAU.

El 4 de marzo, los recursos humanos del LAUSD dieron una guía a los empleados que decía “La vacuna Moderna está siendo administrada actualmente por las enfermeras del Unificado de Los Ángeles y otros profesionales de la salud con licencia a los empleados del Unificado de Los Ángeles. Usted programará su cita […]. Proporcionará una prueba de vacunación a través del DailyPass a efectos de notificación del tiempo de ausencia”.

Como informó ‘The Defender’ el 10 de marzo, Daily Pass es un sistema de seguimiento de COVID desarrollado por Microsoft que escaneará a los empleados y estudiantes mediante un código de barras antes de que puedan entrar en la escuela cada día. El LAUSD es el primer distrito escolar que anuncia que exigirá a todos los estudiantes y empleados que obtengan el Pase Diario, que, según las autoridades escolares, coordinará los controles de salud, las pruebas COVID y las vacunas. Los datos recogidos se comunicarán a las autoridades de salud pública y a otros colaboradores sanitarios del LAUSD.

Según la demanda de los empleados, el proceso de desarrollo de una vacuna suele durar años, con muchas fases de prueba diferentes, ya que los efectos secundarios de una nueva vacuna pueden tardar años en manifestarse. “Nadie conoce los efectos a corto, medio o largo plazo de esta intervención médica a lo largo de 1, 5, 10 o 50 años”, dijo la HFDF.

Al imponer las vacunas experimentales COVID, el LAUSD está “obligando a los empleados a elegir entre mantener a sus familias o ser víctimas de la experimentación humana”, dijo el HFDF. “La vacunación forzosa no sólo no es ética, sino que viola los principios fundamentales de una sociedad libre y debe terminar”.

En diciembre de 2020, ‘Children’s Health Defense’ publicó “Mandatos de las vacunas: ¿Una erosión de los derechos civiles?”, que examina la historia y las consecuencias de los mandatos de vacunación, y lo que usted puede hacer para protegerse a sí mismo y a los miembros de su familia. El libro electrónico sobre los mandatos de vacunación puede descargarse aquí.