Cada semana ‘The Defender’ publica los últimos datos del Sistema de Notificación de Efectos Adversos de las Vacunas (‘Vaccine Adverse Events Reporting Syste’, VAERS por sus siglas en inglés) sobre las lesiones y muertes notificadas después de que las personas recibieran una de las tres vacunas COVID que han recibido la Autorización de Uso de Emergencia en los Estados Unidos.

El VAERS, que depende de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades, es el principal sistema financiado por el gobierno para notificar las reacciones adversas a las vacunas en los Estados Unidos. En la UE, las sospechas de reacciones al fármaco se notifican a EudraVigilance, que también hace un seguimiento de las notificaciones de lesiones y muertes tras las vacunas experimentales COVID.

‘Health Impact News’ (Noticias sobre el impacto en la salud) ha recopilado los últimos datos de EudraVigilance sobre las notificaciones de lesiones y muertes relacionadas con la vacuna COVID y ha encontrado -hasta el 17 de abril- 7.766 notificaciones de muertes y 330.218 de lesiones tras las inyecciones de las cuatro vacunas COVID aprobadas para uso de emergencia en la UE: Moderna, Pfizer, AstraZeneca y Johnson & Johnson, comercializado bajo la marca Janssen.

El informe de ‘Health Impact News’ desglosa los datos por vacuna, tipo de lesión y país.

Según el informe, las cifras totales de informes de lesiones y muertes para cada vacuna fueron:

  • Pfizer-BioNTech: 4.293 muertes y 144.607 lesiones
  • Moderna: 2.094 muertes y 15.979 lesiones
  • AstraZeneca: 1.360 muertes y 169.386 lesiones
  • Johnson & Johnson (Janssen): 19 muertes y 246 lesiones

Los trastornos cardíacos y sanguíneos/linfáticos se encuentran entre las lesiones más frecuentes.

Según su sitio web, EudraVigilance fue lanzado por la Agencia Europea de Medicamentos en 2012. Las autoridades reguladoras de los medicamentos nacionales y las empresas farmacéuticas titulares de las autorizaciones de comercialización (licencias) de los medicamentos envían electrónicamente a EudraVigilance las notificaciones de presuntos efectos adversos.