El Foro Económico Mundial (FEM) e importantes empresas, tras las conversaciones mantenidas en la reunión anual del mes pasado en Davos (Suiza), lanzaron una nueva iniciativa: “Definir y construir el metaverso”.

Como el nombre de la iniciativa indica, los interesados aún están definiendo exactamente lo que significa el término “metaverso”.

Sin embargo, según el FEM, en parte, el metaverso implica un momento “en el que nuestras vidas digitales -nuestras identidades, experiencias, relaciones y activos en línea- se vuelven más significativas para nosotros que nuestras vidas físicas”.

Una de las personas que participó en las conversaciones, Julia Goldin, directora de producto y marketing de LEGO, se mostró optimista sobre cómo el metaverso podría ayudar al desarrollo de los niños:

“Para nosotros, la prioridad es ayudar a crear un mundo en el que podamos dar a los niños todos los beneficios del metaverso -uno con experiencias inmersivas, creatividad y autoexpresión en su núcleo- de una manera que también sea segura, proteja sus derechos y promueva su bienestar.”

Aunque las charlas se centraron en cierta medida en cómo definir definitivamente el término “metaverso”, también se habló mucho de quiénes deberían participar en su desarrollo -y beneficiarse de él-.

Los participantes en las charlas se posicionaron para “desarrollar y compartir estrategias factibles para crear y gobernar” un metaverso “interoperable y seguro”.

También hubo amplios debates sobre el modo de proporcionar “orientación sobre cómo crear un metaverso ético e inclusivo, con la participación de organizaciones de los sectores público y privado, incluidas empresas, la sociedad civil, el mundo académico y los reguladores”.

El FEM describió la iniciativa como una “reunión de las principales voces del sector privado, la sociedad civil, el mundo académico y la política” para “definir los parámetros” del desarrollo futuro del metaverso.

En la sesión del 25 de mayo, titulada “Modelar un futuro compartido: Haciendo el Metaverso” – incluyó a los siguientes panelistas:

  • Chris Cox, jefe de producto de la empresa matriz de Facebook, Meta.
  • Peggy Johnson, directora general de “Magic Leap”, descrita por el FEM como “una empresa de computación espacial que está construyendo la próxima plataforma informática”.
  • Philip Rosedale, fundador de “Linden Lab”, que desarrolló el mundo virtual “Second Life”, adquirido en abril por Meta.
  • Andrew R. Sorkin, columnista financiero de “The New York Times” y copresentador del programa “Squawk Box” de la CNBC.
  • Omar Sultan Al Olama, ministro de Estado para la inteligencia artificial en los Emiratos Árabes Unidos, nombrado en 2017.

Nick Clegg, presidente de Asuntos Globales de Meta, que fue viceprimer ministro del Reino Unido, dijo que la “iniciativa multisectorial” pretende asumir un papel de liderazgo en el establecimiento y la configuración del metaverso.

Según el FEM, las primeras partes interesadas desempeñarán un papel especialmente importante en este proceso:

“‘Definir y construir el metaverso’ es la principal iniciativa mundial de múltiples partes interesadas para desarrollar y compartir estrategias procesables para crear y gobernar el metaverso.

“Al proporcionar un espacio para los líderes mundiales de la industria, la sociedad civil y el gobierno, la iniciativa compartirá y acelerará las ideas y soluciones que darán vida al metaverso.

“Al unirse a la iniciativa, los miembros desempeñan un papel vital en la definición y construcción del metaverso”.

Construir un “metaverso” que aún no se ha definido definitivamente

Aunque, como su nombre indica, parte del objetivo de la iniciativa es definir el término “metaverso”, el FEM ofreció esta definición general muy amplia:

“… un futuro entorno virtual persistente e interconectado en el que los elementos sociales y económicos reflejan la realidad. Los usuarios pueden interactuar con él y entre sí simultáneamente a través de dispositivos y tecnologías de inmersión mientras se relacionan con activos y propiedades digitales.”

Esto amplía la definición “más simple” del metaverso proporcionada por el FEM, que lo describía como “un entorno virtual unificado y persistente al que se accede mediante tecnologías de realidad extendida (RX)”.

El FEM dijo que el metaverso es más útil visto “como una lente a través de la cual ver la transformación digital en curso”, basado en la creencia de que “los mundos virtuales, la incorporación de dispositivos conectados, ‘blockchain’ y otras tecnologías serán tan comunes que el metaverso se convertirá en una extensión de la propia realidad”.

Sin embargo, las definiciones más específicas del metaverso “pueden desarrollarse de muchas maneras, dependiendo de la investigación, la innovación, la inversión y la política”, dijoel FEM .

Según el FEM, el metaverso “puede clasificarse en tres escuelas de pensamiento”, que incluyen:

  • El metaverso “como producto o servicio”.
  • El metaverso “como un lugar en el que los usuarios pueden conectarse, interactuar y transferirse a sí mismos y a sus pertenencias a través de múltiples lugares digitales”, como “las plataformas de juegos y de creadores”.
  • El metaverso como un momento “en el que nuestras vidas digitales -nuestras identidades, experiencias, relaciones y activos en línea- se vuelven más significativas para nosotros que nuestras vidas físicas”, una definición que el FEM describe en su artículo como “convincente”.

A pesar de la ambigua definición del metaverso como concepto por parte del FEM, la organización es tajante a la hora de predecir sus repercusiones y su valor para las grandes empresas (y el mundo real):

“Esto tendrá un impacto significativo en la sociedad. Al igual que Internet y los teléfonos inteligentes transformaron nuestras interacciones sociales y comerciales, el metaverso podría cambiar la forma en que las personas y las empresas se comunican, y operan, de manera innovadora pero impredecible.”

La nueva iniciativa del FEM se centrará en dos áreas clave, o “vías de acción”: la gobernanza del metaverso y la generación de “valor económico y social”. El FEM “explorará temas relacionados con los marcos normativos, las opciones tecnológicas y las oportunidades económicas”.

Más concretamente, la “gobernanza del metaverso” se refiere al compromiso de los miembros de la iniciativa de recomendar “marcos de gobernanza para ecosistemas metaversos interoperables, seguros e inclusivos”.

Según el FEM, “esto implica encontrar una armonización entre la regulación y la innovación para desarrollar la interoperabilidad preservando la privacidad y la seguridad de los usuarios”.

A su vez, “la generación de valor económico y social” implicará que los miembros de la iniciativa compartan y aceleren “ideas y soluciones que den vida al metaverso”.

El FEM dijo que “al hacerlo, trazarán nuevas cadenas de valor y modelos de negocio en todas las industrias, identificando elementos y casos de uso que proporcionen oportunidades económicas”.

Las “partes interesadas” de la industria observan el potencial lucrativo del “metaverso”

La vía de acción de la iniciativa “generar valor económico y social” oculta lo que puede ser el núcleo de los esfuerzos del FEM por establecer las reglas de actuación en el metaverso mientras éste se encuentra en su estado incipiente.

Hasta el momento, más de 60 “partes interesadas” empresariales se han adherido a la iniciativa, entre ellas varias grandes empresas tecnológicas, “Big Tech”, como Meta, Microsoft, la empresa taiwanesa de electrónica de consumo HTC y Sony Interactive, acompañadas por Walmart, el Grupo LEGO, así como académicos y representantes de la sociedad civil.

Muchos de estos actores pueden verse atraídos por el potencial de crecimiento del mercado metaverso, que según predice Bloomberg crecerá hasta los 800.000 millones de dólares en 2024.

Los ejemplos de esto ya son evidentes. Por ejemplo, según el FEM, el popular videojuego Fortnite “vende más de 3.000 millones de dólares en artículos cosméticos digitales a los jugadores cada año, lo que la convierte en una empresa de ropa más grande por ventas que varias casas de moda mundiales.”

Dado el potencial del mercado, no es de extrañar que los ejecutivos de varias grandes empresas tecnológicas, y del propio FEM, hayan elogiado calurosamente la nueva iniciativa del FEM.

Por ejemplo, Jeremy Jurgens, director general del FEM, declaró:

La iniciativa “Definir y construir el metaverso” proporciona al sector un conjunto de herramientas esenciales para construir el metaverso de forma ética y responsable.

“Esto ayudará a garantizar que podamos aprovechar plenamente este medio vital para la interconectividad social y económica de una manera inclusiva, ética y transformadora”.

Clegg, de Meta añadió:

“El metaverso está en una fase temprana de su desarrollo. Si se hace bien, el metaverso podría ser una fuerza positiva para la inclusión y la equidad, salvando algunas de las divisiones que existen en los espacios físicos y digitales actuales.

“Por eso la iniciativa ‘Definir y construir el metaverso’ será tan valiosa. Las empresas tecnológicas no deben darle forma por sí solas. Debe desarrollarse abiertamente con un espíritu de cooperación entre el sector privado, los legisladores, la sociedad civil, el mundo académico y las personas que utilizarán estas tecnologías.

“Este esfuerzo debe realizarse en beneficio de las personas y la sociedad, no de las empresas tecnológicas”.

Brad Smith, presidente y vicepresidente de Microsoft, comentó:

“Aunque el metaverso está en su fase inicial, creemos que tiene el potencial de ofrecer mejores conexiones para todos.

“Como industria, nos corresponde a todos garantizar que este nuevo paradigma se desarrolle de forma que sea accesible para todos, ponga las necesidades de las personas en primer lugar, mejore la conexión humana y se desarrolle de forma segura con la confianza incorporada por el diseño”.

Cher Wang, fundadora y presidenta de HTC, describió el metaverso como algo “inevitable”:

“El metaverso es el siguiente paso inevitable en la evolución de Internet, pero requerirá una amplia colaboración entre todas las partes interesadas del ecosistema para convertirlo en un entorno abierto, seguro y protegido.

“Como tal, esta iniciativa del Foro es un comienzo sólido para abordar los fundamentos tecnológicos y políticos clave que permitan al metaverso desarrollar su ilimitado potencial”.

Del mismo modo, Peggy Johnson, de “Magic Leap”, expresó su entusiasmo por las transformaciones que el metaverso podría aportar, incluso en ámbitos como la sanidad:

“En “Magic Leap” estamos entusiasmados con la forma en que tecnologías como la realidad aumentada transformarán la forma en que vivimos y trabajamos, especialmente en campos en crecimiento como la sanidad, la fabricación y el sector público.

“Para aprovechar el potencial de estas tecnologías, es necesario un marco de regulación bien pensado que proteja a los usuarios y facilite la innovación futura, con el apoyo de todas las partes interesadas, incluidas las empresas, los consumidores, la administración, las ONG y el mundo académico.”

Yat Sui, cofundador y presidente de “Animoca Brands”, una empresa de software de juegos con sede en Hong Kong, describió el potencial del metaverso en el ámbito de la “propiedad digital”:

“‘Animoca Brands’ se complace en formar parte de la iniciativa inaugural del metaverso lanzada por el Foro Económico Mundial y esperamos dialogar con nuestros colegas del sector mientras navegamos por el potencial de la verdadera propiedad digital en el metaverso abierto.”

Otros, como el Dr. Inhyok Cha, director general de la empresa surcoreana de gestión de servicios informáticos “CJ Olive Networks” y director digital del grupo “CJ Corporation”, elogiaron la nueva iniciativa del FEM por su potencial para ayudar a las partes interesadas a superar “complejidades imprevistas”.

“El rápido avance y adopción del metaverso creará complejidades imprevistas en términos de gobernanza, ética y efectos sociales e industriales.

“Por lo tanto, será crucial la necesidad de inteligencia colectiva para anticipar, analizar, diseñar, experimentar y revisar constantemente las medidas y marcos de gobernanza”.

¿Quién gobernará el “metaverso”?

Las observaciones de Inhyok reflejan las cuestiones también reconocidas por el FEM sobre quién “gobernará” el metaverso, y de qué manera.

En concreto, el FEM describe la gobernanza del metaverso como “un reto multifacético que debe tener en cuenta la interoperabilidad, la privacidad, la seguridad y la protección”.

Según el FEM, los “modelos de gobernanza del mundo real” representan una posible opción de gobernanza del metaverso.

Sin embargo, lejos de referirse a instituciones de gobierno definidas constitucionalmente, con controles y equilibrios, el FEM cita el “Consejo de Supervisión” de Facebook como ejemplo de ese “modelo de gobierno del mundo real”.

Sin embargo, según el FEM, “no todos los legisladores están satisfechos” con estos modelos, citando, por ejemplo, nuevas regulaciones como la Ley de Servicios Digitales (“Digital Services Act”) de la Unión Europea, que vigilará la moderación de contenidos y la “desinformación” en las plataformas de medios sociales.

Otros posibles modelos de gobernanza citados por el FEM son los sistemas basados en el usuario y basados en la tecnología blockchain y los tokens no fungibles (NFT).

Empresas tecnológicas deseosas de desarrollar las tecnologías del futuro ‘metaverso’

Para las grandes empresas tecnológicas, la rentabilidad potencial y las fuentes de ingresos que ofrece el metaverso van de la mano de la capacidad de las empresas para desarrollar las tecnologías que se utilizarán para crear el metaverso.

De hecho, el FEM nos dice que “las principales empresas tecnológicas, como Apple, Google, Meta Platforms (Facebook), Microsoft, Niantic y Valve, están desarrollando la tecnología que dará forma al futuro del metaverso.”

El FEM añade que el metaverso estará conformado por tres posibles innovaciones tecnológicas, como “la realidad virtual (RV), la realidad aumentada (RA) y las interfaces cerebro-ordenador (ICB)”.

Aunque la RV y la RA pueden resultar familiares para muchos, la ICB representa la más ambiciosa de estas tres vías tecnológicas, y puede desmentir las verdaderas intenciones del FEM y de las “partes interesadas” en esta nueva iniciativa.

En concreto, la ICB pretende “sustituir por completo las pantallas y el hardware físico”.

El FEM se refiere a tecnología como Neuralink, que “requiere neurocirugía para implantar dispositivos en el cerebro”, como ejemplo de ICB.

Durante la reunión, el presidente del Grupo Alibaba, J. Michael Evans, se entusiasmó con los “rastreadores individuales de la huella de carbono”, que se asemejan a la tecnología del “subsidio personal de carbono” de la que ya informó “The Defender”.

Del mismo modo, el director general de Nokia, Pekka Lundmark, predijo que en 2030 “los teléfonos inteligentes se implantarán directamente en el cuerpo”, lo que seguramente facilitará la expansión del metaverso.