Documentos internos de la compañía revelan que los principales fabricantes de alimentos para bebés venden a sabiendas alimentos para bebés que contienen metales pesados tóxicos, como arsénico inorgánico, plomo, cadmio y mercurio a niveles que superan en cientos de veces los límites federales de seguridad, según investigadores del Congreso que publicaron su informe el 4 de febrero.

Todos estos metales pesados están relacionados con el cáncer, enfermedades crónicas y efectos neurotóxicos, que provocan daños devastadores al desarrollo de los cerebros de los bebés. Según el resumen del informe:

“La Administración de Alimentos y Medicamentos (‘Food and Drug Administration’, FDA por sus siglas en inglés) y la Organización Mundial de la Salud los han declarado peligrosos para la salud humana, en particular para los bebés y los niños, que son más vulnerables a sus efectos neurotóxicos. Incluso los niveles bajos de exposición pueden causar daños graves y a menudo irreversibles en el desarrollo cerebral”.

Las pruebas internas de Gerber, Beech-Nut Nutrition Company, Nurture, Inc., que vende productos Happy Baby, y Hain Celestial Group, Inc., que vende los mejores alimentos orgánicos para bebés de la Tierra, mostraron niveles de metales pesados muy por encima de los límites establecidos para el agua embotellada por la FDA y de la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (‘U.S. Environmental Protection Agency’, EPA por sus siglas en inglés).

Los ingredientes de los alimentos para bebés en ciertos productos contenían hasta 91 veces el nivel de arsénico, hasta 177 veces para el plomo, 69 veces para el cadmio y 5 veces los niveles de mercurio permitidos en el agua embotellada. Las empresas, a pesar de ello, aprobaron esos productos para la venta.

Los alimentos para bebés Hain Celestial, que dicen ser orgánicos, tenían niveles similares de metales tóxicos, culparon a la FDA diciendo que la agencia aprobó sus prácticas de fabricación y pruebas.

Según la CNN, para la Organización Mundial de la Salud el arsenico, el plomo, el cadmio y el mercurio se encuentran entre los 10 principales productos químicos preocupantes de para los lactantes y los niños.

Linda McCauley, decana de la Escuela de Enfermería Nell Hodgson Woodruff de la Universidad Emory, quien estudia los efectos ambientales en la salud, dijo al New York Times:“No se ha demostrado que ningún nivel de exposición a estos metales sea seguro en bebés vulnerables”.

El Subcomité de Política Económica y de Consumo de los Estados Unidos y el Comité de Supervisión y Reforma, que llevaron a cabo la investigación, solicitaron a las empresas que presentaran voluntariamente los documentos internos de prueba.

Otras tres compañías de alimentos para bebés se negaron a cooperar con la investigación del comité: ‘Sprout Organic Foods’; Walmart, que vende la comida para bebés ‘Parent’s Choice’; y Campbell Soup Company, que vende la comida para bebés ‘Plum Organics’.

El representante Raja Krishnamoorthi (D-Ill.), presidente del Subcomité de Política del Consumidor de la Cámara de Representantes, dijo que le preocupaba enormemente que su falta de cooperación sugiriera que las empresas podrían estar ocultando la presencia de niveles aún más altos de metales pesados tóxicos en sus productos alimenticios para bebés que los productos de sus competidores. Dijo que la FDA deja a los fabricantes libres para probar sólo materias primas, o, para la gran mayoría de los alimentos para bebés, les permite no llevar a cabo ninguna prueba en absoluto.

Krishnamoothi le dijo a la CNN que las hojas de cálculo proporcionadas por los fabricantes son “estremecedoras” porque muestran evidencia de que algunos alimentos para bebés contienen cientos de partes por mil millones de metales peligrosos. “Sin embargo, sabemos que en muchos casos, no deberíamos tener nada más que partes de un solo dígito por mil millones de cualquiera de estos metales en ninguno de nuestros alimentos”, dijo.

Krishnamoorthi dijo que era pesimista ante la idea de que la FDA fuera a tener el estómago para hacer frente a la corrupción de la industria. “Estoy siendo realista. Necesitamos legislación para obligar a la FDA a desarrollar estándares y obligar a las empresas a obedecer”.

Según CBS News, se ha hecho notar la existencia del informe a la FDA y está revisando los hallazgos.