El Dr. Paul Thomas, MD miembro de la Academia de Pediatría estadounidense (FAAP por sus siglas en inglés) es uno de los principales pediatras de Estados Unidos. Su próspera práctica en Portland, ‘Integrative Pediatrics’, emplea a siete proveedores de atención médica y atiende a más de 10.000 niños de Oregón, incluidos niños con diferentes grados de vacunación. El Dr. Thomas explica: “Otras clínicas pediátricas dejan de dar sus servicios a padres que no quieren continuar vacunando a sus hijos que ya han sido dañados por las vacunas”, dice, “o no quieren vacunar a sus hermanos o a los niños subsiguientes. Estas familias encuentran en nuestra clínica un lugar donde honramos el derecho de los padres a elegir cómo vacunar a su hijo”. El Dr. Thomas tiene más de 1 millón de seguidores en YouTube y es autor de muchos libros, incluyendo “The Vaccine-Friendly Plan” (El Plan Favorable a las Vacunas), que proporciona una alternativa a las recomendaciones de vacunas de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés).

En los últimos años, las Autoridades de Salud de Oregón se han dirigido al Dr. Thomas para anular su acceso al programa ‘Vaccines For Children’ de los CDC, programa que paga las vacunas para familias de bajos ingresos. ‘Providence Health Plan’ y los Planes de Salud de Oregon de las Autoridades de Salud de Oregón, que son los principales planes de salud, han amenazado con retirar la cobertura de seguro del Dr. Thomas, alegando que la baja tasa de vacunación de su clínica implica una atención inferior. Estas maniobras podrían desencadenar un efecto dominó, obligando al Dr. Thomas a cerrar su clínica y dejando a miles de familias sin atención pediátrica.

El libro del Dr. Thomas, que fue un best-seller en 2016,“The Vaccine-Friendly Plan”,es un desafío persuasivo al calendario de vacunas de los CDC y al modelo de negocio del cartel pharma/médico. Ese libro ha convertido al Dr. Thomasen un blanco para esos intereses creados y sus aliados mediáticos. El Dr. Thomas y su colega el Dr. James Lyons-Weiler acaban de publicar un estudio revisado por pares que compara la salud de los niños vacunados y los no vacunados que ven en su clínica. Los datos de ese estudio destrozan las ortodoxias religiosas de la industria de las vacunas.

“Los no vacunados simplemente no se enferman y rara vez sufren de retrasos en el desarrollo, autismo, alergias, ansiedad, depresión y enfermedades autoinmunes que los altamente vacunados sí sufren”, dijo el Dr. Thomas. “Cada semana me llegan padres contándome historias de cómo han visto sus hijos retroceder en su desarrollo hasta caer en el autismo o les han visto ‘desaparecer’ a la vez que las luces de sus ojos se apagaban, a menudo después de las vacunas”.

El Dr. Thomas está liderando la batalla para practicar la atención a la salud desde la ética y una medicina basada en la evidencia, para honrar el consentimiento informado y oponerse a la coerción médica a todos los niveles. Los planes de salud no están haciendo caso al peso abrumador de la investigación científica que está siendo publicada cuando confunden la vacunación completa —de acuerdo con las directrices federales— con una buena atención médica. Los incentivos de reembolso para vacunas y los sistemas de contratos según “medidas de calidad” y las juntas médicas estatales favorables a las grandes industrias farmacéuticas obligan efectivamente a la mayoría de los pediatras a seguir el calendario de los CDC o arriesgar sus clínicas. El Dr.Thomas es víctima de esta dinámica.

Por favor, únase a mí para apoyaral Dr. Thomas en exigir pruebas científicas de la afirmación de que las vacunas no tienen culpa en la epidemia de enfermedades crónicas infantiles en la actualidad.

Pueden ayudar al Dr. Thomas escribiendo y llamando a la gente que aparece más abajo. Por favor, háganles saber que la clínica ‘Integrative Pediatrics’ está siguiendo el método científico y logrando mejores resultados de salud. Comparta el estudio revisado por pares que se ha publicado recientemente basado en la práctica del Dr. Thomas.

Esto es lo que puede hacer:

1. Escriba a la gobernadora Kate Brown sobre la rescisión del contrato para el programa ‘Vaccines For Children’ por parte de las Autoridades de Salud de Oregón. La dirección es 500 Summer St. NE E44, Salem, OR 97301.

2. Envíe un correo electrónico a las siguientes personas con respecto al aviso de rescisión del contrato por parte de ‘Providence Health Systems’:

3. Envíe copias de sus cartas y correos electrónicos a los abogados del Dr. Thomas: Troy S. Bundy y Hart Wagner, 1000 SW Broadway Portland, OR 97205, tsb@hartwagner.com

Si desea donar a este esfuerzo, por favor contribuya a Freedom To Choose (Libertad para elegir). Gracias por unirse en mi apoyo al Dr. Thomas

Aquí hay una línea de tiempo y datos que explican la importancia del trabajo del Dr. Paul Thomas:

En 2008: El Dr. Thomas abrió su clínica Integrative Pediatrics donde se respeta el consentimiento informado, siempre.

En 2016: El Dr. Thomas publicó su libro más vendido: “The Vaccine-Friendly Plan.

Este gráfico que muestra datos poderosos comenzó a ser compartido en los mítines para detener los mandatos obligatorios de vacunas y a nivel nacional por Children’s Health Defense:

Entonces comenzaron los ataques:

2018, 2019, 2020: La Junta Médica de Oregón (OMB) envió cartas de quejas que amenazaban con anular la licencia del Dr. Thomas.

2019: Oregon Health Authority elimina el programa VFC (Vaccines For Children) de la clínica ‘Integrative Pediatrics’, con lo cual impide que familias desfavorecidas tengan acceso a vacunas gratuitas.

2020: Oregon Health Authority y Oregon Health Plan recinden sus contratos con ‘Integrative Pediatrics’, el Dr. Thomas y todo su personal. Providence Health Plan rescinde todos los contratos con ‘Integrative Pediatrics’ y todos sus empleados.

El equipo legal del Dr. Thomas escribió lo siguiente con respecto a los ataques de la OMB:

“La información que yo proporcioné a la OMB demuestra claramente que no he violado ninguna ley o norma, y que he cumplido plenamente con el estándar de atención requerido para los médicos que administran y supervisan las vacunas infantiles. Simplemente no hay base fáctica para las quejas que se han pronunciado”.

Marzo de 2020: Se publica este artículo revisado por pares,“Exposición aguda y retención crónica de aluminio en tres calendarios de vacunas y efectos de la variación genética y ambiental”, que compara la exposición tóxica al aluminio al seguir el calendario de vacunas infantiles de los CDC con el Plan Favorable a las Vacunas.

A lo largo de la vertical izquierda, el eje Y es la cantidad de aluminio retenido en el cuerpo de un niño. A lo largo de la parte inferior, el eje X horizontal son los días de vida desde el nacimiento hasta los 800 días (2+ años). Observe que las exposiciones amarillas y negras (programación de los CDC) superan los niveles establecidos para los adultos (línea roja) los días en que los niños reciben sus vacunas. Los CDC y el VFP (verde) superan los niveles de seguridad pediátrica (azul)

El gráfico de barras anterior muestra que los niños pasan entre el 30 y el 70% de sus primeros 7 meses de vida por encima del nivel tóxico para su edad (línea azul). Aquellos en el Plan Favorable a las Vacunas (VFP) pasan el 6% de sus primeros 7 meses por encima del nivel tóxico de aluminio.

Octubre de 2020: Se publica el esperado estudio comparando a niños vacunado frente a los no vacunado: Incidencia relativa de visitas a la oficina y tasas acumuladas de diagnósticos facturados a lo largo del eje de vacunación. En respuesta a los ataques infundados de la OMB, el Dr. Thomas encargó un análisis exhaustivo de calidad el cual examinó todos los resultados de salud de los pacientes nacidos en su clínica. Ese conjunto de datos fue despersonalizado para proteger la identidad de los pacientes y con el Dr. James Lyons-Weiler, publicaron este histórico documento revisado por pares

¿Qué muestra este estudio? Se examinaron 3.324 pacientes nacidos en la clínica ‘Integrative Pediatrics’ entre junio de 2008 hasta enero de 2019. 561 no fueron vacunados por completo y 2.763 fueron parcialmente vacunados.

Estas gráficas muestran que los altamente vacunados (naranja) eran mucho más propensos a sufrir problemas de salud que los no vacunados (azul).

Según el Dr. Thomas:

“Las diferencias de estilo de vida entre los grupos vacunados y no vacunados en esta práctica no pueden explicar la gran diferencia en los resultados, y si lo hacen, entonces sería objetivo concluir que todos deberían adoptar el estilo de vida seguido por los no vacunados si quieren hijos más saludables. Esa elección de estilo de vida incluye, para muchas familias, evitar algunas o todas las vacunas, y por lo tanto, la preocupación por la elección del estilo de vida está inextricablemente relacionada con la exposición a la vacuna.

“A los padres casi universalmente se les dice por parte de quien sea el proveedor de atención médica de sus hijos que el problema de salud que sufre no se debió a las vacunas, a pesar de la creciente evidencia en la literatura científica que apoya ambos mecanismos de acción plausibles para enfermedades crónicas, incluidas las asociaciones epidemiológicas. Ahora es evidente que la falta de asociación, que ocurre comúnmente, a eventos adversos puede deberse al uso de una estadística de prueba con baja potencia intrínseca y debido a problemas como el modelo que especifica erróneamente y el sesgo de ajuste excesivo y a que se necesitan más investigaciones para actualizar las directrices y recomendaciones a través de estudios adicionales.

“No pudimos detectar efectos negativos generalizados para la salud entre los no vacunados excepto el hecho raro pero significativo del diagnóstico al que se dirigen las vacunas. Podemos concluir que los niños no vacunados en esta clínica no son, en general, menos sanos que los vacunados y que, de hecho, los niños vacunados parecen estar significativamente menos sanos que los no vacunados.

“Es hora de afirmar este hecho: las vacunas no son seguras. Las vacunas se asocian con problemas de salud agudos y crónicos significativos en niños, como asma, rinitis alérgica, problemas respiratorios, problemas de conducta, TDAH, infección respiratoria, otitis media, dolor de oído, otras infecciones, trastornos oculares, eczema, trastornos de la piel y anemia. Esto es lo que los datos anteriores muestran claramente.

“Cada uno de los planes de salud importantes y las grandes instituciones con datos simplemente deben identificar a los no vacunados dentro de su conjunto de datos y emparejar a esos pacientes por edad y demografía para comparar todos los resultados de salud como lo hemos hecho en este estudio histórico. Este es el tipo de trabajo que los CDC, los Institutos Nacionales de Salud, las instituciones de salud pública y todos los principales planes de salud y clínicas deberían estar haciendo. Necesitamos más datos, no menos.

“A medida que se implementan las vacunas COVID-19, es imperativo que se comparen a los que reciben las vacunas con los que no las reciben para examinar todos los resultados de salud. Si no se hace así, se enterrarán los efectos negativos de la vacunación. No es ético administrar una vacuna experimental que no tiene pruebas de seguridad a largo plazo sin establecer un sistema para comparar a quienes reciben las vacunas COVID-19 con aquellos que no las reciben”.