El 1 de febrero, nuestra comunidad perdió a uno de sus iconos más memorables. Tanner Welsh falleció por aspiración silenciosa a los 24 años. Los escritos de su padre sobre el viaje de Tanner crearon una gran conciencia sobre las lesiones por vacunas en la comunidad en general.

Las publicaciones de Tim, el padre de Tanner, en las redes sociales y en plataformas anteriores, como grupos de Yahoo y servidores de listas, hicieron que la lesión provocada por la vacuna que sufría su hijo saliera a la luz pública. Tim, que era muy conocido en la comunidad del autismo como “el padre de Tanner”, se convirtió en un destacado y prolífico mensajero del movimiento por la libertad sanitaria.

Hasta los cuatro años y medio, Tanner había cumplido todos sus hitos de desarrollo a tiempo o antes de lo previsto y había podido llevar una vida feliz y activa. Todo cambió después de que recibiera siete vacunas diferentes en tres tomas como preparación para el jardín de infancia. En ese momento, Tanner perdió todas las habilidades de desarrollo que había adquirido y, según Tim, fue como “dejar salir el aire de un globo”.

Dos días después de recibir las siete vacunas, Tanner entró corriendo en el salón y dijo: “Me llamo Tanner. Me llamo Tanner”. Esas fueron las últimas palabras que Tanner pudo pronunciar en esta vida.

Esta conmovedora entrevista con Polly Tommey de 2016 recoge algunos datos importantes sobre la historia de la familia.

Desde “Children’s Health Defense” enviamos nuestro más sincero pésame a Tim, Cheri y a todos los que conocían y querían a Tanner.