Desde Nueva York hasta California, algunas ciudades y estados se preparan para hacer frente a la escasez de personal sanitario, educadores, policías y bomberos a medida que se acercan los plazos del mandato de vacunación y los trabajadores amenazan con dimitir o ser despedidos, antes que obedecer.

Los hospitales de Nueva York empezaron el lunes a despedir o expulsar temporalmente a los trabajadores sanitarios por desafiar la orden estatal de vacunarse contra el COVID. La escasez de personal resultante hizo que algunos hospitales tuviesen que posponer cirugías electivas u opcionales, o que redujeran los servicios. La gobernadora Kathy Hochul tomó medidas ejecutivas el lunes por la noche para permitir que tropas de la Guardia Nacional con formación médica sustituyan en los centros de salud a los trabajadores de los hospitales que se negaron a cumplir con el mandato de vacunación del estado.

El mandato requiere que los médicos, enfermeras y otros trabajadores de la salud de todo el estado muestren antes de la medianoche del lunes una prueba de haber recibido al menos una dosis de la vacuna COVID para poder seguir trabajando.

Además de las tropas de la Guardia Nacional, la orden de Hochul permite al estado recurrir a trabajadores sanitarios jubilados y a trabajadores de hospitales de fuera del estado en caso de escasez de personal relacionado con las vacunas.

En los 11 hospitales públicos de la ciudad de Nueva York, unos 5.000 de los 43.000 empleados (alrededor del 12%) no estaban vacunados en la mañana del lunes, dijo el Dr. Mitch Katz, director general de “NYC Health + Hospitals”.

“Más del 95% de mis enfermeras están vacunadas hoy en día… cerca del 98-99% de mis médicos han accedido (y se han vacunado) y todas nuestras instalaciones están abiertas y en pleno funcionamiento”, dijo Katz cuando se le preguntó si tenía conocimiento de alguna escasez de personal.

Los empleados no vacunados de los 11 hospitales públicos estarán de baja sin sueldo, pero podrán volver si se vacunan, según la portavoz de “NYC Health + Hospitals “, Stephanie M. Guzmán.

Cualquier empleado de un centro sanitario estatal que no reciba al menos una dosis de la vacuna COVID antes del final del día lunes, salvo exenciones aprobadas, “será expulsado temporalmente de forma inmediata”, según el Departamento de Salud del Estado de Nueva York.

El Centro Médico del Condado de Erie, en Búfalo, aplazó las cirugías electivas u opcionales para pacientes internos y dejó de aceptar pacientes de cuidados intensivos de otros hospitales mientras se preparaba para despedir a cientos de empleados no vacunados, dijo el portavoz Peter Cutler.

Cutler dijo que la decisión de reducir algunas operaciones causaría molestias a los pacientes y perjudicaría las finanzas del hospital. Las cirugías electivas u opcionales en régimen de hospitalización aportan alrededor de un millón de dólares a la semana.

“Tuvimos que tomar una decisión sobre dónde podíamos hacer temporalmente algunos cambios para poder garantizar que otras áreas de servicios se vieran lo menos afectadas posible”, dijo Cutler. “Desde el punto de vista financiero, es un gran problema”.

Hasta el lunes por la noche, el 92% del personal de los hospitales, el 92% del personal de las residencias de ancianos y el 89% del personal de los centros de atención a adultos habían recibido al menos una dosis de la vacuna, según la oficina del gobernador. Hasta este pasado fin de semana, el 16% de los 450.000 trabajadores sanitarios de Nueva York no estaban completamente vacunados.

El Dr. Marty Makary, oncólogo quirúrgico y jefe del Centro de Trasplante de Islotes del Johns Hopkins, dijo en un tuit que cambiar a las enfermeras experimentadas por miembros de la Guardia Nacional, los cuales no están familiarizados con los sistemas del hospital, las formas locales de hacer las cosas y los protocolos de emergencia, tiene riesgos.

Hizo un llamamiento a los demás para que reconozcan la inmunidad natural “en lugar de demonizar a nuestros héroes que se jugaron la vida y pasaron el COVID”.

Aunque la gran mayoría de los trabajadores sanitarios han sido vacunados contra el COVID, según la CNN, el requisito podría seguir provocando que un número significativo de trabajadores no pueda trabajar, una escasez que podría conducir a una peor atención médica para los pacientes con la enfermedad.

La gobernadora Hochul pidió a los trabajadores sanitarios que aún no se han vacunado que “por favor, hagan lo correcto”, y calificó la vacunación de “simple sentido común”.

“Crea un reto absoluto”, dijo el lunes la Dra. Rochelle Walensky, directora de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades, en una entrevista en el programa “Good Morning America” de la cadena ABC.

“Lo que yo diría es [que necesitamos] hacer algo de trabajo, para educar a estos trabajadores de la salud, para ir a encontrarles donde están, para entender dónde están sus dudas y que así podamos vacunarlos y que vuelvan a trabajar”. [we need]

Los profesores de la ciudad de Nueva York tienen hasta las 5 de la tarde del viernes para obedecer el mandato de vacunación, después de que el tribunal levante la prohibición temporal

Trabajadores del sistema educativo de Nueva York tienen hasta las 5 de la tarde del viernes para mostrar una prueba de al menos una dosis de la vacuna COVID, después de que un tribunal federal de apelaciones levantara el lunes una prohibición temporal sobre el mandato que originalmente iba a entrar en vigor el lunes.

Se había programado un panel de tres jueces para escuchar el caso el miércoles, casi una semana después de que el tribunal concediera una orden temporal de un juez el viernes. En cambio, el Tribunal de Apelaciones del 2º Circuito de Estados Unidos en Manhattan emitió su fallo el lunes por la noche, en una medida que sorprendió a muchos, disolviendo la orden judicial del viernes y denegando la moción original, informó la NBC de Nueva York.

La Federación Unida de Profesores (“United Federation of Teachers”) dijo que el 3% de los profesores (unos 3.400) siguen sin vacunarse

El Departamento de Educación (“Department of Education”, DOE) alabó la decisión de los jueces. Pero el mayor sindicato de profesores de la ciudad no se apresuró tanto en celebrar los nuevos avances.

En un comunicado, la Federación Unida de Profesores dijo que, si bien las estimaciones de la ciudad daban por vacunado al 97% de los profesores, una reciente encuesta del sindicato mostraba que “sólo un tercio (de los líderes de la Federación Unida de Profesores por encima de los líderes de las secciones) cree que a partir de ahora sus escuelas puedan abrir sin interrupciones, dada la potencial escasez de personal no vacunado.”

Los abogados que representan a los profesores que demandaron para bloquear el mandato dijeron que presentarán una demanda al Tribunal Supremo de Estados Unidos, según un informe local de “CBS News”.

La profesora de educación especial de Staten Island, Rachel Maniscalco, es una de las profesoras que ha demandado al DOE ante un tribunal federal. Arremetió contra el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio.

“Es casi como si el dictador se sintiera menospreciado y tratara de hacer todo lo posible para arruinar a la gente que no está de acuerdo con él”, dijo Maniscalco a Dick Brennan de CBS2.

El abogado Mark Fonte, que presentó la demanda en nombre de los profesores y otras personas, dijo a “Crain’s New York Business” que él y el abogado Louis Gelormino estaban solicitando inmediatamente que interviniera el Tribunal Supremo.

“A partir de este momento el mandato está en marcha”, dijo, añadiendo que él y Gelormino estaban “consternados y decepcionados por este giro de los acontecimientos”.

Fonte añadió: “Con miles de profesores sin vacunar, la ciudad puede arrepentirse de lo que ha deseado. Nuestros hijos se quedarán sin profesores y sin seguridad en las escuelas”.

Decenas de policías estatales de Massachusetts dimiten por el mandato de la vacuna COVID

Decenas de agentes de la Policía Estatal de Massachusetts presentaron sus papeles de dimisión tras el mandato de la vacuna COVID del estado, según informó la Asociación de la Policía Estatal de Massachusetts (“State Police Association of Massachusetts”, SPAM por sus siglas en inglés).

En virtud de la orden ejecutiva del gobernador Charlie Baker emitida el mes pasado, todos los empleados del departamento ejecutivo están obligados a presentar una prueba de vacunación antes del 17 de octubre, o corren el riesgo de perder su empleo.

“Es lamentable que el gobernador y su equipo hayan decidido imponer uno de los mandatos de vacunación más estrictos del país sin alternativas razonables”, dijo en un comunicado el presidente de la Asociación Estatal de Policía, Michael Cherven.

Chervin dijo que los policías deberían tener “alternativas razonables” a la obligación de vacunarse, como llevar mascarillas y someterse a pruebas periódicas.

La semana pasada, un juez estatal denegó una solicitud del sindicato policial del estado para bloquear el mandato de vacunación del gobernador para los policías, según WBZ-TV. Hasta un 20% de los empleados de la policía estatal siguen sin vacunarse, según el abogado del sindicato policial.

El sindicato, que representa a 1.800 trabajadores, emitió un comunicado tras la decisión del juez:

“A través de COVID, hemos estado en primera línea protegiendo a los ciudadanos de Massachusetts y de otros lugares. Sencillamente, todo lo que pedimos son las mismas adaptaciones básicas que otros innumerables departamentos han proporcionado a sus unidades de primera intervención, y que se trate una enfermedad relacionada con el COVID como una lesión en acto de servicio.

“Hasta la fecha, docenas de policías ya han presentado su documentación de dimisión, algunos de los cuales planean regresar a otros departamentos que ofrecen alternativas razonables, como el uso de mascarillas y la realización de pruebas periódicas. La Policía Estatal ya tiene una escasez crítica de personal y lo reconoció con los movimientos sin precedentes que sacaron a los policías de las unidades especializadas que investigan homicidios, terrorismo, delitos informáticos, incendios, pandillas, narcóticos y tráfico de personas, y los devolvieron al patrullaje uniformado.”

Una fuente dijo a WBZ-TV el lunes que sólo un policía estatal ha dicho a recursos humanos que dimitiría debido al mandato de la vacuna. Otros hablaron con Recursos Humanos para evaluar cuál sería su pensión si decidieran jubilarse, dijo la fuente.

Con el fallo del juez, los policías no vacunados sólo tenían unos días para ponerse la primera dosis de la vacuna o podrían enfrentarse a medidas disciplinarias.

Los bomberos de Rhode Island y Los Ángeles luchan contra los mandatos

Un juez del Tribunal Superior de Rhode Island está bloqueando los intentos de los bomberos locales de impugnar el mandato del departamento de salud estatal de que todos los trabajadores sanitarios, incluidos los paramédicos, se vacunen antes del 1 de octubre o se arriesguen a perder sus puestos de trabajo y sus licencias.

La Asociación de Bomberos de Rhode Island solicitó una medida cautelar que habría detenido la aplicación, argumentando que el mandato de la vacuna viola los acuerdos de negociación colectiva de los bomberos, que están protegidos por la Ley de Arbitraje de los Bomberos, una ley estatal que requiere la negociación de los términos y condiciones de empleo.

El sindicato de bomberos de Providence no formó parte de la demanda. La semana pasada emitió un comunicado en el que afirmaba que podría perder el 10% de su plantilla si no se introducen cambios en el mandato del 1 de octubre.

“Incluso las normativas más bien intencionadas tienen consecuencias”, dijo entonces el sindicato. “Es nuestro deber decir que las consecuencias de este mandato causarán dificultades indebidas a los propios bomberos que nos protegieron”.

A principios de este mes, los bomberos de Los Ángeles demandaron a la ciudad por su mandato de que todos los empleados deben recibir la vacuna COVID.

La demanda de los bomberos alega que el mandato viola los derechos de privacidad autónomos de los empleados, protegidos por la Constitución. El grupo presentó la demanda en nombre de la Fundación de Bomberos por la libertad (“Firefighters 4 Freedom Foundation”), una organización sin ánimo de lucro que representa a 529 miembros del departamento.

Los demandantes en el caso son “peones en una partida de ajedrez política, a los que 13 políticos del Ayuntamiento de Los Ángeles ordenaron que se inyectaran una vacuna experimental -a pesar de sus objeciones- o que perdieran sus puestos de trabajo”, afirma la demanda.

El Ayuntamiento de Los Ángeles aprobó un mandato que exige que los empleados de la ciudad estén totalmente vacunados contra el COVID a principios de octubre. Los bomberos solicitan una orden de restricción temporal del mandato hasta que se celebre una audiencia y se dicte una nueva orden judicial, alegando que la ciudad no tiene derecho a forzar su conformidad.

Según “Los Angeles Times”, “cientos” de funcionarios jurados y civiles del Departamento de Policía de Los Ángeles se han unido a los bomberos para oponerse al mandato.

“Apoyamos los derechos individuales, la elección personal y la gestión de nuestra propia salud”, dijo la sargento del Departamento de Policía de Los Ángeles, Verónica Saucedo. Dijo que a los miembros de la zona de Roll Call les preocupa que la ciudad los destituya o los despida si no se vacunan.

Los sindicatos que representan a la policía y a los bomberos advierten que la ciudad será menos segura si los agentes son despedidos o se marchan a causa del mandato de vacunación.