Un nuevo estudio de metanálisis revela que la exposición a la radiación de dispositivos inalámbricos como teléfonos celulares, iPads y computadoras portátiles aumenta significativamente el riesgo de cáncer de mama.

El estudio de metanálisis (un análisis estadístico que combina los resultados de múltiples estudios científicos) examinó ocho estudios que publicados entre 1996-2015. El mayor riesgo se encontró en mujeres mayores de 50 años.

Hay muchos estudios que pueden proporcionar un mecanismo causal. Por ejemplo, se ha demostrado que la exposición a la radiación de radiofrecuencia (RF) (la radiación emitida por dispositivos inalámbricos) puede causar una disminución en la producción de melatonina,y los estudios han demostrado que los niveles reducidos de melatonina pueden conducir a cáncer de mama.

El Dr. John West, un especialista en cáncer de mama, ha publicado estudios de casos que proporcionan apoyo clínico a estos hallazgos. West publicó algunos de estos casos en un artículo de 2013, “Cáncer de mama multifocal en mujeres jóvenes con contacto prolongado entre sus senos y sus teléfonos celulares.” Estos casos revelan cáncer de mama en mujeres menores de 40 años, a pesar de que el cáncer de mama es poco frecuente en mujeres tan jóvenes cuando no hay antecedentes familiares o predisposición genética.

Cuatro casos de mujeres de 21 a 39 años muestran cáncer de mama multifocal invasivo. La propagación de los tumores y el hecho de que todas estas mujeres informen de que llevabanr sus teléfonos en su sostén sugiere una posible asociación con la exposición a la radiación de los tumores con los teléfonos celulares.

West se unió recientemente al consejo asesor de ‘Physicians for Safe Technology’,una organización de médicos y profesionales de la salud cuya misión es proporcionar liderazgo de confianza en la promoción de un uso más seguro de la tecnología.

Otros médicos notifican hallazgos similares. En un video publicado por Kevin Kunze, productor de la película “MovilizarRobert Nagourney presenta el caso de una de sus pacientes, Donna, una joven mujer atlética y sana que llevaba su teléfono celular en el sostén y desarrolló cáncer de mama. La diseminación de los tumores en su seno se asemeja a la forma del teléfono celular.

Un estudio de 10 años del gobierno de los Estados Unidos encontró evidencia clara de que los teléfonos celulares causan cáncer. El estudio fue realizado por el Programa Nacional de Toxicología (NTP), la agencia de expertos estadounidense sobre toxinas, y fue el mayor estudio de su tipo. Los resultados fueron confirmados por otro estudio importante realizado por un organismo científico líder, el Instituto Ramazzini.

Sin embargo, la Comisión Federal de Comunicaciones (Federal Communication Commission, FCC por sus siglas en inglés), encargada de regular el impacto de la tecnología inalámbrica en la salud, desestimó los resultados del estudio y se negó a revisar sus directrices de 1996 que niegan los efectos adversos para la salud de la tecnología inalámbrica. En febrero de 2020, Children’s Health Defense presentó una demanda contra la FCC impugnando la decisión de la FCC de no revisar las directrices. La Corte de Apelaciones de los Estados Unidos para el Circuito del Distrito de Columbia escucharálos argumentos orales en el caso el 25 de enero de 2021.