La pandemia terminará cuando la sociedad decida reanudar la vida normal, en lugar de esperar a que los “tableros” del COVID registren cero casos, afirman los autores de un artículo publicado el martes en “The BMJ”.

“Los tableros de control de la pandemia proporcionan un combustible interminable para la cobertura de las noticias, asegurando el constante interés periodístico de la pandemia de COVID-19, incluso cuando la amenaza es baja”, escribieron el doctor Peter Doshi, editor principal de “The BMJ”, y David Robertson, candidato a doctor en historia de la Universidad de Princeton.

“Al hacerlo, podrían prolongar la pandemia al limitar la sensación de poder pasar página o la vuelta a la vida anterior a la pandemia”, escribieron los autores.

Un análisis de “The BMJ” sobre el siglo pasado demostró que las pandemias anteriores, incluida la gripe española, se desvanecieron gradualmente a medida que las sociedades “dejaron de consumirse por los impactantes análisis estadísticos de la pandemia”.

En las décadas siguientes, la gente retomó sus rutinas normales incluso en medio de breves picos de muertes por gripe, los cuales a veces incluso superaron los niveles de la pandemia.

El análisis de “The BMJ” se produce cuando la atención mundial se centra en la variante Omicron COVID, que parece ser más transmisible pero menos mortal que las cepas anteriores.

Publicaciones como el diario británico “The Sun” han elaborado mapas en los que se muestran los “puntos calientes más tempranos” de Omicron, y el tablero de datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) hace un seguimiento de los cambios diarios de los casos de COVID.

“Aunque las representaciones visuales de las epidemias existen desde hace siglos, la COVID-19 es la primera en la que los tableros de datos en tiempo real han saturado y estructurado la experiencia del público”, afirman Doshi y Robertson.

“Desactivar o desconectarnos de los tableros de datos puede ser la acción más poderosa para acabar con la pandemia”.

Hasta el 13 de diciembre, se había registrado una muerte en todo el mundo de una persona que dio positivo por Omicron, según el sitio de comprobación de datos Snopes.com.

La doctora sudafricana que alertó por primera vez a la OMS sobre Omicron declaró esta semana a los medios de comunicación británicos que estaba asombrada por la “reacción exagerada” de Gran Bretaña y algunas otras naciones europeas ante la variante.

Varios países impusieron fuertes restricciones a los viajes en vuelos internacionales, además de imponer normas más estrictas sobre el uso de mascarillas en casa, multas y confinamientos prolongados.

Por su parte, la OMS pidió precaución.

“Aunque Omicron cause una enfermedad menos grave, el gran número de casos podría volver a desbordar a los sistemas sanitarios que no estén preparados”, dijo el Director General de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesu.

También señaló que la protección de las vacunas puede estar disminuyendo.

“La evolución de las pruebas sugiere una pequeña disminución de la eficacia de las vacunas contra las enfermedades graves y la muerte, y un descenso en la prevención de las enfermedades o infecciones leves”, dijo Tedros.