Las vacunas de refuerzo de COVID-19 podrían ser más perjudiciales que beneficiosas, según los científicos entrevistados a finales del mes pasado por “The New York Times”.

Los científicos advirtieron “que demasiadas inyecciones podrían perjudicar la capacidad del cuerpo para combatir el COVID” y “podrían causar una especie de fatiga del sistema inmunitario.”

El lunes, las autoridades israelíes empezaron a ofrecer a cualquier persona mayor de 60 años la oportunidad de recibir una cuarta inyección, o segundo refuerzo de la vacuna COVID.

Pero hubo científicos que dijeron a “The Times”, antes de que Israel confirmara que ofrecería la cuarta inyección, que la ciencia todavía no ha demostrado la utilidad de poner una inyección de refuerzo adicional para combatir la nueva variante de Omicron .

Hay un informe oficial sobre la muerte de un israelí por Omicron. Sin embargo, según “The Times of Israel”, no está claro que Omicron haya causado la muerte del individuo, un hombre de unos 60 años que había sido hospitalizado semanas antes por una enfermedad preexistente.

Un nuevo informe de la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido demostró que las dosis de refuerzo son menos eficaces contra el Omicron que las variantes anteriores, y su eficacia desaparece en sólo 10 semanas.

El profesor Hagai Levine, epidemiólogo y presidente de la Asociación de Médicos de Salud Pública de Israel, dijo a “The New York Times” que no hay pruebas científicas publicadas de que sea necesaria una cuarta inyección para prevenir la enfermedad grave de Omicron.

“Antes de poner una cuarta inyección, es preferible esperar a ver los datos científicos”, dijo Levine.

Benny Muchawsky, un arquitecto afincado en Israel, dijo a “The Times” que la presión para administrar dosis de refuerzo para la variante Omicron “se parecía a la histeria”.

“Israel es el laboratorio de la vacuna contra el coronavirus”, dijo Muchawsky.

El Dr. Robert Malone se hizo eco de ello durante una entrevista con Joe Rogan:

“Actualmente el nombre del país es ‘Pfizrael’. Ya no es Israel. Su gobierno tiene un acuerdo financiero con Pfizer y sólo tienen la vacuna de Pfizer”.

Malone dijo a Rogan que los datos científicos apuntan a que las dosis de refuerzo hacen más daño que bien.

Citando datos de Dinamarca, dijo a Rogan que parece haber “una eficacia negativa en correlación con el aumento de las dosis”, lo que significa que cuantas más dosis o refuerzos reciba un individuo, más posibilidades tendrá de infectarse.